
El paseo es para el perro
«Un paseo no es simplemente salir a la calle caminar de una esquina a otra para luego volver a casa. Tampoco ir a soltar a tu perro a una plaza y despreocuparte de él”, Juan Andrés Inzunza, Educador Canino y Adiestrador.
Los seres humanos tenemos muchos recursos para entretenernos sin necesidad de salir de casa. Por ejemplo: ver televisión, navegar por Internet, chatear, leer un libro y tantas otras cosas. El perro es más simple. Solo tiene a sus tutores, de quienes depende para su bienestar, escenario en el cual el paseo cobra mucha relevancia.
¿Cómo es un buen paseo para un perro? En Educandogs lo definimos así: “una instancia de recreación, fuera de casa, en la que el perro puede disfrutar de exploraciones libremente controladas; expresar conductas naturales de su especie; drenar adecuadamente su energía física; estimularse mentalmente; orinar y defecar; profundizar el vínculo con su grupo humano e interactuar con el entorno y todos los estímulos que formen parte de él (otros perros, otras especies animales, humanos y otros)”.
Varias cosas podemos rescatar de lo anterior. Primero, que el paseo es para el perro, asumiendo que es parte importante de su bienestar. Segundo, que debemos planificarnos y salir con tiempo para permitir a nuestro perro conectarse con el entorno y pueda estimularse adecuadamente. Y, tercero, que nuestros perros no deben deambular sin correa por el espacio público (para resguardar su seguridad y respetar siempre las libertades de otros perros y otras personas), y, menos aún, en zonas naturales en las que su presencia puede alterar e incidir negativamente en la calidad de vida de animales silvestres.
En este sentido, vale la pena tener algunas recomendaciones sobre la mesa:
1) Idealmente, un perro debe pasear todos los días de su vida, al menos un par de veces al día (salvo que existan contraindicaciones médicas, estados de convalecencia u otras complicaciones médicas).
2) No uses herramientas aversivas. Los collares de ahorque, de púas o collares eléctricos atentan contra el bienestar físico y emocional de los caninos, inhiben su aprendizaje y menoscaban el vínculo con sus humanos.
3) Usa correa larga (3-5 metros). Salvo en veredas angostas y zonas densas donde es mejor traer la correa corta, un perro debería tener opción de explorar, y para ello la correa larga es muy adecuada.
4) Elige rutas agradables para tu perro, que permitan cómoda exploración y sean lugares atractivos para él.
5) Usa un morral con premios que sepas que a tu perro le fascinan, y trabaja el vínculo y la comunicación con él, por ejemplo, llamándolo y premiándolo, proveyéndole juegos de olfato y/o enseñándole nuevas habilidades.
6) En el caso de que tengas un perro con problemas de conducta (agresiones a otros perros o personas, tirones de correa, reactividad u otros), es indicado que consultes lo antes posible a un/a profesional del comportamiento (del campo de la Educación Canina y/o la Etología Clínica) para evaluar cuanto antes el caso y diseñar un plan de trabajo conductual adecuado a las necesidades de tu perrito para ayudarle a superar esa situación.
Un paseo no es simplemente salir a la calle a caminar de una esquina a otra para luego volver a casa. Tampoco ir a soltar a tu perro a una plaza y despreocuparte de él.
Un paseo es una instancia donde el vínculo entre humanos y perros puede profundizarse, y donde se puede trabajar en la comunicación mutua, descubrir nuevos lugares, socializar con distintos estímulos ambientales y adaptarse a nuevos escenarios y contextos.

Por Juan Andrés Inzunza B
POR Juan Andrés Inzunza B Educador Canino y Adiestrador Entrenador Canino Acreditado International Association of Animal Behavior Consultants (IAABC – ECA) Fundador y Director Educadogs® Instagram: @jib_educandogs